Realizada en la Universidad Tisinghua de Beijing, “ha demostrado la flexibilidad, capacidad de ampliación, eficiencia energética y costes reducidos de las tecnologías vRAN y NFV de Alcatel-Lucent”, señalan desde la compañía. Un paso muy importante en la evolución hacia las redes de 5G, que ofrece una mejor convergencia de la red y soporte a más usuarios con unas velocidades de datos superiores y mejor experiencia de usuario.
El objetivo de esta tecnología es dar respuesta a un número creciente de usuarios y empresas que demandan más conectividad en su entorno. Se prevé que la Internet de las Cosas y los millones de personas que se conectarán a Internet por primera vez supondrán una gran demanda de tráfico en las redes móviles en los próximos años, con una previsión de que el tráfico de datos se multiplicará prácticamente por 10 en el período de 2014 a 2019.
En la prueba de campo se desplegó la tecnología vRAN de Alcatel-Lucent en una superficie de 442 hectáreas en el campus de la universidad, que cuenta con aproximadamente 57.000 estudiantes y profesores. En la prueba se facilitó cobertura de red en las áreas de interior y de exterior, y se demostró la flexibilidad de la red vRAN.
Glenn Booth, vicepresidente senior y director general de la Unidad de Negocio de LTE de Alcatel-Lucent, explica que la firma “se ha comprometido a proporcionar las últimas innovaciones que permitan a nuestros clientes rentabilizar al máximo sus redes LTE y facilitarles una línea de evolución gradual a 5G. Esta prueba de campo es un claro ejemplo de cómo trabajamos con nuestros clientes para desarrollar, probar y desplegar redes con las mayores prestaciones y eficiencias y los costes más reducidos.”